Estudiantes de posgrado UDES realizaron caracterización de un crudo proveniente de Ecuador y obtuvieron biodiésel

Estudiantes de posgrado de la Especialización en Gestión Ambiental en la Industria Minera y Petrolera de la Universidad de Santander (UDES) llevaron a cabo caracterizaciones físico-químicas de un crudo proveniente del país vecino, Ecuador.

Es la primera vez que en este programa se realiza dichas prácticas logrando afianzar los conocimientos adquiridos en las clases teóricas. Los estudiantes realizaron la determinación de la calidad del crudo mediante las pruebas de gravedad API, empleando como como equipos de medición los hidrómetros.

La gravedad API es un parámetro que permite determinar la eficiencia de crudo la cual se puede dar mediante los siguientes indicadores: Extra-pesado, pesado, mediano, liviano o extra-liviano.

Igualmente, se realizó la determinación de la gravedad API a diferentes elementos, como agua, ACPM, diésel, mermelada y al crudo proveniente de Ecuador, donado por la empresa Quality Services, cuya gravedad API obtenida en cabeza de pozo fue de 30.4 siendo un crudo tipo exportación de referencia liviano. En laboratorio se determinó que la gravedad API a condiciones estándar fue de 30.7, demostrando la similitud en ambos casos.

Otra práctica realizada fue la determinación del tipo de hidrocarburos: Saturados e Insaturados empleando reactivo de Baeyer y Agua de Bromo como indicadores a los siguientes elementos: como cetonas, ciclohexanos, ciclohexenos, toluenos, ésteres, butadieno, Petróleo, entre otros, obteniendo en el caso de los hidrocarburos saturados un cambio en la tonalidad de violeta a marrón en el reactivo de Baeyer y de naranja se evidencio la degradación de dicha tonalidad hasta volverse translucido para el agua de bromo

El coordinador de la Especialización en Gestión Ambiental en la Industria Minera y Petrolera, Robinson Mancilla, aseguró que “estas pruebas permiten la clasificación adecuada para la caracterización de los tipos de crudo de manera rápida y eficaz”.

Por otro lado, se realizó la obtención de biodiésel a partir de aceite de cocina que trajeron los estudiantes, dicha conversión se da por medio de la propiedad de la transesterificación en donde el aceite se transforma en glicerina pudiéndose emplear para la elaboración de diferentes lubricantes y otros tipos de implementos en la petroquímica y biodiesel que se emplea como fuente de suministro energético para movilizar vehículos.

Llevar a cabo estas prácticas también ha sido importante para que los estudiantes tengan presente el impacto ambiental, donde es fundamental tener en cuenta el daño que causa el exceso de contaminación por los aceites y lubricantes. Teniendo en cuenta que, por cada litro de aceite que se vierte en diferentes lugares, se contaminan 40.000 litros de agua, afirmó Robinson Mancilla.

Este laboratorio se realizó por la gestión del coordinador del programa de Ingeniería Petroquímica, Robinson Mancilla Estupiñán, con la ayuda logística del profesor Javier Sanabria Cala.

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 Por: Ángel David de León Navarro